25 Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos
a Dios; y los presos los oían.
26 Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal
manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron
todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron
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Había pasado algunos trasnochos
preparando la enseñanza para la
reunion de oración de esa semana, y regresaba de la calle, apurada por cambiarme el vestido, y revisar por última vez, que las diapositivas que iba a usar, estuvieran en el orden correcto en mi pen drive, cuando una noticia me cortó el aliento.
reunion de oración de esa semana, y regresaba de la calle, apurada por cambiarme el vestido, y revisar por última vez, que las diapositivas que iba a usar, estuvieran en el orden correcto en mi pen drive, cuando una noticia me cortó el aliento.

Eran dias de revuelta popular en nuestro pais, la incertidumbre y las pasiones revueltas por el dolor, el luto, los apegos civicos, y los instintos de supervivencia frente a una escasez de medicinas y alimentos creciente, estaban desbordando las calles.
En estas circunstancias, el mensaje de Dios para nuestra congregacion estaba basado en el relato de la inesperada experiencia de Pablo y Silas encarcelados en Filipos. Habían ido alli, instruidos por una visión, para comenzar a evangelizar Europa. Diligentes, visitaban la segunda ciudad del área, privilegiada por su cercanía a yacimientos de riquezas minerales importantes, su proximidad a las vías de intensa actividad comercial del imperio y por los importantes logros militares alcanzados por Roma en su territorio. Todo esto provoco que en Filipos se asentara un porcentaje significativo de ilustres veteranos de guerra. La poblacion estaba muy orgullosa de gozar, en su mayoria, de los privilegios de ser ciudadano romano.
Por lo que aquella tarde Pablo y su campanero de misiones, encontraron el tipo preciso de dificultades que se generan a partir de las pasiones humanas exaltadas, al tocar los intereses economicos de un grupo que sabe apelar a la devocion civica de las masas, para acusarlos injustamente.
En estas circunstancias, el mensaje de Dios para nuestra congregacion estaba basado en el relato de la inesperada experiencia de Pablo y Silas encarcelados en Filipos. Habían ido alli, instruidos por una visión, para comenzar a evangelizar Europa. Diligentes, visitaban la segunda ciudad del área, privilegiada por su cercanía a yacimientos de riquezas minerales importantes, su proximidad a las vías de intensa actividad comercial del imperio y por los importantes logros militares alcanzados por Roma en su territorio. Todo esto provoco que en Filipos se asentara un porcentaje significativo de ilustres veteranos de guerra. La poblacion estaba muy orgullosa de gozar, en su mayoria, de los privilegios de ser ciudadano romano.
Por lo que aquella tarde Pablo y su campanero de misiones, encontraron el tipo preciso de dificultades que se generan a partir de las pasiones humanas exaltadas, al tocar los intereses economicos de un grupo que sabe apelar a la devocion civica de las masas, para acusarlos injustamente.
Desbaratar la obra del enemigo,
eliminando una fuente de ganancias deshonestas, al liberar de la esclavitud
espiritual a una joven, provoco al instante una reaccion del mundo espiritual contra Pablo y Silas; la multitud es incitada a culparlos de alterar
el orden de la ciudad. Violando
los procesos legales romanos, ambos misioneros son echados a la celda de máxima
seguridad, por los magistrados presionados a castigarlos.
Después de ser azotados, injuriados, encerrados, y atados a cadenas y cepo, los vemos mantenerse en una actitud de gozo que solo podia brotar de la obediencia al llamado del Espíritu Santo, al alcanzar la medianoche cantando himnos, con tanta fuerza que todos los prisioneros les escuchaban.
Después de ser azotados, injuriados, encerrados, y atados a cadenas y cepo, los vemos mantenerse en una actitud de gozo que solo podia brotar de la obediencia al llamado del Espíritu Santo, al alcanzar la medianoche cantando himnos, con tanta fuerza que todos los prisioneros les escuchaban.
Aquella alabanza estremeció la
noche; justo en el momento de más
oscuridad, la tierra se movio de tal forma, que las cadenas de los presos se
rompieron, y el carcelero consiguio la luz de la Salvación en las palabras del Evangelio de Cristo, predicado por esta pareja de misioneros visionarios.
Dios conocia cada minuto de aquella tarde de mi vida, cada detalle de lo que ocurriria con aquella familia tan estimada, y aun asi me encomendo su alta para entregar aquel mensaje ese dia. Cuan visionaria podría
considerarme a mí misma, si ante el dolor humano que me golpeo tras la noticia sorpresiva, cancelaba el compromiso contraído, a solo dos horas de iniciarse la reunion? Cuan digna
representante de los valores de aquella amiga ahora ausente, podia considerarme, si me retrasaba cambiando el color de mi atuendo por otro más representativo del luto que llevaba ahora en mi corazon? Pues no tenía mucho tiempo para responderme a mí
misma, pero aun estaba en mi historial de chats de mi telefono, la ultima conversacion que tuve con mi amiga, y deduje rapidamente, lo que hubiera dicho ella, con sencillez, si estuviera allí,
frente a mi vestidor. La voz profética que opero en ella, me habria sacudido al instante, advirtiendome no retrasarme a un compromiso congregacional, en razón de la liviandad de escoger el color de un vestido. Nunca representaran los muy cuidados, ni los muy rasgados atuendos externos, las intimas luchas internas de uno que ha sido comisionado a exaltar las virtudes de Cristo, en toda circuntancia.

Quizá para ti, la oscuridad, la desnudez, el frio y el dolor de la medianoche han llegado hoy, y es un hecho que las heridas duelen mas a medianoche. Tus pies, presos en el cepo, tu cuerpo y tu animo pueden sentirse mas pesados que las frias rocas de aquella prision romana.
Tal vez valga la pena que medites ahora, en la
verdad de que un solo grito de alabanza, puede hacer más que mil oraciones y argumentaciones lógicas. Quizá para ver más de un
milagro de liberación, salvación, y honra, necesitas enfocarte en que lo que trasciende, con resultados acordes al Plan Eterno de
Dios, no son tus sentimientos ante una circunstancia específica. Lo que determina el exito de tu proposito, es tu dependencia
completa de Aquel que te ha llamado, guiandote a un nuevo ¨Consumado es, tu proposito en mi¨.
Me moví rápidamente para llegar al templo, y unirme a los músicos que dirigian la alabanza a la congregación, desde
ese altar donde muchas veces la voz de mi amiga fue usada para ministrar al pueblo. Sin importar la
confusión del momento anterior, Su Gracia manifiesta, nos sostuvo, y las verdades del Evangelio de Cristo, fueron
anunciadas con gozo.
Ignorando la inesperada noticia de esa tarde, mi bosquejo de aquel sermón, hacia hincapié en una verdad advertida por
Pablo desde una de sus prisiones postreras, a sus amados hijos en la fe, de la
iglesia fundada en Filipos, como fruto de aquellos días de trabajo misionero sostenido mas alla de la oscuridad densa de la medianoche. Nuestra ciudadanía no es de este mundo, escribia Pablo. Por mucho amor patrio que sintamos, un día dejaremos esta hermosísima morada tropical que es nuestra tierra. Iremos a donde pertenecemos, allí de donde vienen todos nuestros beneficios.
El exceso de amor cívico, que movía
a los filipenses a defender su región, los condujo a cometer injusticias, como las sufridas por el, en aquella primera visita misionera.Y, en estos días cuando el acontecer
diario en nuestro país, se mueve tortuosamente entre bandos que esgrimen banderas
de amor patrio y compromiso ciudadano,
muchas amistades se disuelven, muchos dolores se infligen inmisericordemente al hermano, y mucho ignoramos el luto ajeno, olvidando que la máxima bandera que urge ser levantada es la bandera de la reconciliación.
Somos ciudadanos del cielo, como
afirma el Salmista Alex Márquez. Es allí donde pasaremos la Eternidad. Después
de toda negra noche, un día, veremos desde otro angulo, como es que todo se estremece con nuestra alabanza…Tal como oí
a familiares y hermanos cantar aquella noche y la siguiente, a la partida de nuestra amiga: Él se manifiesta a nosotros en medio de la alabanza!
Aquella niña de húmedos rizos largos, que vi crecer hasta
convertirse en talentosa salmista, fiel profeta de Dios y sabia consejera, no tenia raices permanentes aqui. Por mas que la extranemos, y que sigamos cuestionandonos por su partida, ella no pertenecía a este mundo. Está alabandole hoy a El a plenitud, como un día lo haremos todos los
que han sido comprados por Su Sangre... y, ejerciendo en la maxima plenitud de la gracia divina, sus derechos de privilegiada ciudadana del cielo!!.
Escucha a Alex Maquez
https://www.youtube.com/watch?v=khaNCfDl1gM&list=RDkhaNCfDl1gM#t=32